“Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Escribir, por ejemplo: la noche está estrellada,
y tiritan, azules, los astros, a lo lejos…
…El viento de la noche gira en el cielo y canta.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Yo la quise, y a veces ella también me quiso...
…En las noches como ésta la tuve entre mis brazos.
La besé tantas veces bajo el cielo infinito.
Ella me quiso, a veces yo también la quería.
Cómo no haber amado sus grandes ojos fijos.
Puedo escribir los versos más tristes esta noche.
Pensar que no la tengo. Sentir que la he perdido…
…Oír la noche inmensa, más inmensa sin ella.
Y el verso cae al alma como al pasto el rocío...
… Qué importa que mi amor no pudiera guardarla.
La noche está estrellada y ella no está conmigo.
Eso es todo. a lo lejos alguien canta. a lo lejos.,
Mi alma no se contenta con haberle perdido…
… Como para acercarla mi mirada la busca.
Mi corazón la busca, y ella no está conmigo.
La misma noche que hace blanquear los mismos árboles.
Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos.
Ya no la quiero, es cierto, pero cuánto la quise.
Mi voz buscaba el viento para tocar su oído.
De otro. Será de otro. Como antes de mis besos.
Su voz, su cuerpo claro. Sus ojos infinitos.
Ya no la quiero, es cierto, pero tal vez la quiero.
Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido…
…Porque en noches como ésta
la tuve entre mis brazos,
Mi alma no se contenta con haberla perdido.
Aunque éste sea el último dolor que ella me causa,
y éstos sean los últimos versos que yo le escribo.”
*Yo me he asomado
a las profundas simas
de la tierra y del cielo
y les he visto el fin con los ojos
o con el pensamiento.
De un corazón llegué al abismo,
y me incliné por verlo,
y mi alma y mis ojos se turbaron:
¡Tan hondo era y tan negro!*
*Si copia tu frente
del río cercano la pura corriente
y miras tu rostro del amor encendido,
soy yo, que me escondo
del agua en el fondo
y, loco de amores, a amar te convido;
soy yo, que, en tu pecho
buscada morada,
envío a tus ojos mi ardiente mirada,
mi blanca divina...
y el fuego que siento la faz te ilumina.
Si en medio del valle
en tardo se trueca tu amor animado,
vacila tu planta, se pliega tu tallo…
soy yo, dueño amado,
que, en no vistos lazos
de amor anhelante,
te estrecho en mis brazos;
soy yo quien te teje la alfombra florida
que vuelve a tu cuerpo
la fuerza de la vida;
soy yo, que te sigo
en alas del viento soñando contigo.
Si estando en tu lecho
escuchas acaso celeste armonía
que llena de goces tu cándido pecho,
soy yo, vida mía…;
soy yo, que levanto
al cielo tranquilo mi férvido canto;
soy yo, que, los aires cruzando ligero
por un ignorado, movible sendero,
ansioso de calma,
sediento de amores,
penetro en tu alma.*
“Tu aliento es el aliento de las flores
Tu voz es de los cisnes la armonía;
Es tu mirada el esplendor del día,
Y el color de la rosa es tu color….
Tú prestas nueva vida y esperanza,
A un corazón para el amor ya muerto:
Tú creces de mi vida en el desierto
Como crece en un páramo la flor.”
“Te recuerdo como eras en el ultimo otoño.
Eras la boina gris y el corazón en calma.
En tus ojos peleaban las llamas del crepúsculo
Y las hojas caían en el agua de tu alma.
Apegada a mis brazos como una enredadera,
las hojas recogían tu voz lenta y en calma.
Hoguera de estupor en que mi sed ardía.
Dulce jacinto azul torcido sobre mi alma.
Siento viajar tus ojos y es distante el otoño:
boina gris, voz de pájaro y corazón de casa
hacia donde emigraban mis profundos anhelos
y caían mis besos alegres como brasas.
Cielo desde un navío. campo desde los cerros.
Tu recuerdo es de luz, de humo, de estanque en
calma!
Más allá de tus ojos ardían los crepúsculos.
Hojas secas de otoño giraban en tu alma.”
estos no se los nombres, ya que los saque de un fanfic que leo, pero sinceramente me encantan... asi qe nose... si quieren los leen